¡La construcción ancha definitiva de los 80! - Porsche 928 Strosek - Fuertemente DESCUIDADO, ¡aun así comprado!

Halle77 Dortmund

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El clip comienza con la búsqueda de un tesoro del tuning olvidado: un Porsche 928 que, a finales de los ochenta, fue transformado por el preparador alemán Strosek en un radical ensanchado de carrocería. Ya en el primer recorrido salta a la vista lo raro que es este kit: aletas ensanchadas, paragolpes delantero anguloso con intermitentes integrados, faros más planos en lugar de los escamoteables de serie, voluminosos estribos laterales y un alerón trasero continuo le otorgan al coche un aspecto radicalmente distinto. El presentador explica que de esta conversión solo existe un puñado de ejemplares, lo que convierte al auto en un auténtico unicornio automovilístico.

A pesar de su estética espectacular, el Strosek 928 fue descuidado durante décadas. La pintura está mate y quemada en algunas zonas, las juntas de goma se deshacen y en el interior huele a humedad. Los asientos de cuero están agrietados, el salpicadero muestra los típicos daños por calor y un revoltijo de cables añadidos revela antiguas instalaciones de sonido y alarmas. Bajo el capó se encuentra el robusto V8 de 5,0 litros, pero las fugas de aceite, las mangueras porosas y una correa de distribución visiblemente castigada hacen prever reparaciones costosas. Aun así, el V8 cobra vida tras varios intentos, ruge con fuerza a través de un escape con fugas y demuestra que la base mecánica sigue sana.

En la breve prueba en un tramo cerrado, el Porsche muestra cuánto potencial conserva pese a su estado: la dirección se siente precisa, la caja automática cambia sorprendentemente suave y la suspensión —aunque con silentblocks deteriorados— deja intuir lo solvente que era el 928 para devorar kilómetros de autopista. Al mismo tiempo, los protectores de pasos de rueda que se agitan, un golpeteo metálico en el eje trasero y unos frenos casi ineficaces evidencian que una restauración completa es ineludible.

El protagonista decide comprarlo de todas formas. Motivos principales: la irrepetible rareza del kit Strosek, la sólida base del concepto transaxle y las posibilidades de revalorización de un auténtico ensanchado de los años ochenta. Calcula un precio de adquisición en la franja baja de los cinco dígitos y unos costes de restauración adicionales de 30 000 a 40 000 euros, una inversión que solo tiene sentido con mucha pasión y una perspectiva a largo plazo.

Finalmente, el vídeo traza la hoja de ruta: desmontaje hasta la carrocería desnuda, limpieza del bajo con hielo seco, reconstrucción del V8 con todas sus juntas, rescate de la pintura o repintado en el tono original, interior completamente nuevo en cuero de época y una discreta modernización del chasis. De este modo, el Porsche 928 Strosek no solo será rescatado, sino que renacerá como cápsula del tiempo rodante de los ochenta: una declaración a favor de la a menudo subestimada era transaxle y una carta de amor a la edad dorada del tuning de carrocería ancha

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